Un seguro de esquí o snowboard es una póliza creada específicamente para cubrir los riesgos asociados con la práctica de estos deportes de invierno. Su principal objetivo es proteger al titular de gastos imprevistos que puedan surgir debido a accidentes o eventualidades mientras se esquía.

¿Qué cubre un seguro de esquí y snowboard?

Al elegir un seguro para estos deportes, es importante conocer qué coberturas ofrece, ya que varían de una póliza a otra. Algunas de las coberturas más comunes son:

Asistencia médica en pista

Esta cobertura es básica y se incluye en todos los seguros de esquí, incluso en aquellos que te venden las estaciones al adquirir el forfait de un día. Cubre los gastos médicos derivados de una lesión ocurrida en pista, antes de ser trasladado a un centro médico. Esto incluye primeros auxilios, medicamentos y otros tratamientos necesarios mientras te encuentras en la montaña.

Traslado a centro sanitario

En caso de que necesites atención médica en un hospital o clínica tras un accidente en pista, esta cobertura se encarga de los gastos de traslado. Esto puede implicar el uso de ambulancias, helicópteros u otros medios de transporte para asegurar tu bienestar y seguridad. Al igual que la asistencia médica, esta cobertura también está incluida en los seguros básicos, incluidos los que se ofrecen con la compra de un forfait.

Responsabilidad civil

Esta cobertura cubre los daños que puedas causar a otras personas mientras practicas esquí o snowboard. Si, por ejemplo, accidentalmente chocas con otro esquiador y le causaras lesiones, la póliza se encargará de los gastos médicos de la persona afectada y las posibles indemnizaciones. Es fundamental asegurarse de que tu póliza incluya esta cobertura, ya que muchos seguros básicos ofrecidos en estaciones de esquí no la incluyen.

Coberturas adicionales en seguros de esquí y snowboard

Además de las coberturas mencionadas, muchos seguros ofrecen opciones adicionales para ampliar la protección. Algunas de estas opciones incluyen rescate fuera de pista, daños o robo del equipamiento, cancelación de viaje, indemnización de forfaits por lesión, gastos de rehabilitación, entre otras.